¿Y después del Sínodo qué va a pasar?
13/11/2024 | Por Acción FamiliaInteresante crónica de la Serie «Visto desde Roma», por nuestro colega Julio Loredo, explica el final del Sínodo de la Sinodalidad, y lo que podemos esperar. VEA EL VIDEO
Interesante crónica de la Serie «Visto desde Roma», por nuestro colega Julio Loredo, explica el final del Sínodo de la Sinodalidad, y lo que podemos esperar. VEA EL VIDEO
“También aquellas palabras del Apóstol: ‘Los que son de Cristo han crucificado su carne con los vicios y las concupiscencias’ [Gal. 5, 24] valen igualmente para todos los tiempos”.
La gran fuerza espiritual contra la expansión mundial de la secta comunista era la Iglesia hasta que fue penetrada por el progresismo.
Pío XII, en su Carta Encíclica Mystici Corporis Cristi (Sobre el Cuerpo Místico de Cristo) enseña que la verdadera Iglesia de Cristo es la “Iglesia santa, católica, apostólica, romana” y que es una e indivisa.
La teología moderna corta de raíz cualquier posibilidad de alcanzar una verdad inmutable, y se convierte en un análisis meramente «pastoral», y, por tanto, efímero.
La Iglesia fue constituida jerárquica por Nuestro Señor y los Papas a lo largo de los siglos han condenado los intentos de democratizarla. Ésta no es la solución para los escándalos de abuso.
La vana esperanza de que la ciencia y el progreso resolverían todos los problemas se ha visto trágicamente desmentida por dos guerras mundiales, y hoy, por una pandemia cuyos consecuencias son imprevisibles.
Se trata de soldados cobardes que deponen las armas ante la simple presencia del enemigo, o de traidores que pretenden a toda costa hacer las paces con los opositores, a saber, con el enemigo irreconciliable de Dios y de los hombres
En el siglo XVIII los hombres que se consideraban «modernísimos» ya venían con la idea de que era necesario «ceder para no perder» ante la Revolución. Es la misma impiedad expresándose por las mismas formas y buscando acobardar de la misma manera…
Las instituciones católicas, sobre todo por su tarea sobrenatural, tienen una fortaleza extraordinaria: nunca pueden ser derribadas si quienes las representan son enteramente fieles a su deber