La Iglesia y el marketing
07/07/2020 | Por Acción Familia
Famoso publicista analiza símbolos e instituciones católicas tradicionales desde el punto de vista del marketing
Famoso publicista analiza símbolos e instituciones católicas tradicionales desde el punto de vista del marketing
San Buenaventura enseña que el hombre es imagen de Dios y que las demás criaturas son “vestigios” de Dios. Así, La contemplación de las criaturas nos eleva a Dios
Vivimos en un mundo donde se nos ha acostumbrado a la cultura de lo desechable. La mediocridad nos rodea y la vulgaridad nos invade. La “cultura” de lo desechable también entró en las relaciones humanas. A veces, cuando realizamos un trabajo arduo, tenemos en medio del mismo gratas sorpresas. Días atrás me encontraba haciendo una
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Hay una velada escuela espiritual que busca deformar la piedad católica, según un modelo dulce y sentimental, de la cual la estampita de San Antonio era un ejemplo contundente.
El Salmista dice: ‘Odié la asamblea de los malos y no quiero sentarme al lado de los impíos’ (S1. 25, 5). Recordaos de estas palabras del Profeta, en el comienzo del primer salmo: ‘Feliz aquel que no tomó parte en el consejo de los malos'”. (Sl. I, I)
El anhelo de belleza y perfección, produce joyas, terciopelos, sedas, en definitiva todo lo que sirve para el adorno del hombre y de la vida. Esos recursos decorativos fueron hechos para adornar la tradición, el poder legítimo, los valores sociales auténticos.
«Por aquí ha pasado el pueblo más grande de la historia y la más portentosa de las civilizaciones humanas; ese pueblo ha debido tener del egipcio lo grandioso, del griego lo brillante, del romano lo fuerte; y sobre lo fuerte, lo brillante y lo grandioso, algo que vale más que lo grandioso, lo fuerte y lo brillante: lo inmortal y lo perfecto».
En los remotos tiempos de la dominación romana, por un descuido de un pastor, nació el queso Roquefort en una de las grutas del Combalou.
Versailles manifiesta el bienestar terreno, la gloria terrena, el placer terreno, el orden natural. Pero ¿dónde están los valores de la Revelación y de la Redención, tan presentes y tan vivos en el arte medieval? ¿Dónde está, en una palabra, la Cruz de Nuestro Señor Jesucristo?
Este vídeo nos muestra el esplendor y la grandeza como eran concebidas antaño. Sería sólo para descansar un poco de la vulgaridad que nos rodea.