Historia de una decadencia en dos instantáneas
19/10/2025 | Por Acción Familia
Nada es tan vulgar y común como una propaganda de Coca-Cola. Sin embargo puede servirnos para ver como cambió el mundo en 100 años.
Nada es tan vulgar y común como una propaganda de Coca-Cola. Sin embargo puede servirnos para ver como cambió el mundo en 100 años.
La historiografía moderna ha demostrado que la Edad Media fue una época en que hubo un desarrollo inmenso de las artes, de la ciencia y de la vida social
Asistimos a un creciente alejamiento de la opinión pública con relación a la vida de la sociedad. Ahí está la altísima abstención de los votantes. Es una situación absolutamente anormal y de graves consecuencias para cualquier sociedad.
El futuro Papa San Pío X desarrolla el verdadero concepto de la pobreza evangélica. El sermón es particularmente digno de nota porque contraría falsas nociones que circulan entre los católicos incluso hoy en día.
El mes de Octubre ha sido dedicado por la Iglesia a honrar a la Santísima Virgen, muy especialmente con el Santo Rosario. La misma Reina celestial añadió gran virtud a esta oración fundada y propagada por el ínclito Patriarca (Santo) Domingo, por inspiración e impulso de la Señora, como bélico instrumento y muy poderoso para dominar a los enemigos de la fe
Feliz criatura en cuyo favor la Providencia dispuso maravillas de la naturaleza y de la gracia, en el desvelo de una madre pura y llena de fe.
Con ocasión del día de las Glorias del Ejército chileno, Acción Familia adhiere a este aniversario, recordando las palabras del Profesor Plinio Corrêa de Oliveira sobre la necesidad de la existencia de las FFAA y la simpatía que deben despertar en la opinión nacional.
La espada está hoy completamente superada como arma de guerra, y nadie puede querer entrar en combate afilando una espada, pero de manera ella se tornó simbólica, que no se comprende un oficial sin su espada.
Es una ilusión peligrosa pensar que un hombre o un sistema puedan sacarnos de un día a otro de la crisis en que estamos, y devolver a nuestro país su estabilidad y grandeza. La caída es muy profunda y viene desde muy lejos. No existe camino de salvación a no ser el de las virtudes morales y sociales.
Lo propio de la Iglesia es producir una cultura y una civilización cristiana. Y generar todos sus frutos en una atmósfera social plenamente católica. El católico debe aspirar a una civilización católica como el hombre encarcelado en un subterráneo desea el aire libre.